¿Cómo debe ser una vida sin renuncias, ni vacíos,
ni despedidas a destiempo o prematuras,
ni lágrimas escondidas,
ni pensamientos secretos encerrados en el armario del alma…?
ni despedidas a destiempo o prematuras,
ni lágrimas escondidas,
ni pensamientos secretos encerrados en el armario del alma…?
¿Y cómo debe ser levantarse y saborear el presente
sin que te duela volver la vista atrás, sin desear desandar tus caminos,
ni silenciar tus palabras, ni coser con hilos de conformidad tus sonrisas
para que se queden fijas en tus labios, evitando sospechas ajenas?
¿Cómo continuar, seguir, convencer, disimular, resistir…?
¿Cómo ocultar con celo, sin perder la sabiduría de la discreción,
aquello que el dolor, solo el dolor, engendra?
Se puede estar toda una vida clavando una aguja en un tapón de corcho
sin dejar ninguna marca visible y al final,
solo al final, saber que el corcho aparecerá lleno de agujeros.
M. Teresa Vidal Gisbert 05/07/2016
sin que te duela volver la vista atrás, sin desear desandar tus caminos,
ni silenciar tus palabras, ni coser con hilos de conformidad tus sonrisas
para que se queden fijas en tus labios, evitando sospechas ajenas?
¿Cómo continuar, seguir, convencer, disimular, resistir…?
¿Cómo ocultar con celo, sin perder la sabiduría de la discreción,
aquello que el dolor, solo el dolor, engendra?
Se puede estar toda una vida clavando una aguja en un tapón de corcho
sin dejar ninguna marca visible y al final,
solo al final, saber que el corcho aparecerá lleno de agujeros.
M. Teresa Vidal Gisbert 05/07/2016